Maternidad Tips

¿Cómo quitar el pañal a un niño de dos años?

Si has llegado hasta aquí esperando una fórmula mágica para quitar el pañal a tu hijo de dos años, lo siento, esta fórmula no existe. Te adelanto, que el proceso de ir al baño y dejar el pañal NO SE APRENDE, es un proceso madurativo, por eso, hay niños que lo harán antes y niños que lo harán después, y no pasa absolutamente nada.

¿Pero puedo probar a quitarlo y ver si está preparado?

Claro. El verano, además de ser la época del año que nuestros peques disfrutan más en playas y piscinas, es el momento más fácil para empezar con la operación pañal y la retirada del mismo. Al hacer calor, es más fácil que vayan por casa con el “culito al aire” que no en invierno que hace más frío, pero eso no debe determinar en absoluto cuando empezar con la famosa “operación pañal”.

Martín, mi peque, cumplió los 2 años en Mayo, y ya hemos empezado a incorporar pequeñas rutinas para introducir esta operación pañal poco a poco y de la manera más respetuosa posible. En casa, no creemos en métodos del estilo de dejar el pañal en 10 días o seguir a rajatabla un plan. A nosotros nos gusta empezar cuando el peque esté preparado, ya que dejar el pañal no es algo que se aprenda, es algo madurativo del niño. Por lo tanto, el pañal lo dejarán cuando estén preparados, no cuando a nosotros nos venga en gusto.

Pero sí que es cierto que se pueden seguir unos consejos para que poco a poco el peque vaya entendiendo que es mucho mejor hacer pipí y caca en el wáter u orinal que no llevar el pañal. Para muchos peques, llevar el pañal es lo más natural del mundo, si no piensa: nada más nacer, le ponen un pañal que les acompaña siempre. Solo lo quitamos para bañarlo, así que para ellos, llevar pañal es como tener pelo o diez dedos en las manos, forma parte del niño. Así que hasta no empiecen a madurar y a entender que el pañal no es una parte del cuerpo y que si hacen sus necesidades en un wáter u orinal, ya podrán ir sin él.

Mis consejos para empezar con la famosa “operación pañal”.

Cuando quité el pañal a Lucas, mi hijo grande, te prometo que nunca se ha hecho un pipí o una caca encima, tampoco ha mojado nunca la cama, pero hemos llevado a cabo los consejos que te voy a contar a continuación.

Mi consejo número uno es que hay que ser respetuoso con el niño, hay que evitar que llore y lo pase mal. Nunca forzar ni castigar. Una vez entendido esto, empecemos con mis consejos:

  • Imitación: seguro que sabes que lo más pequeños aprenden de lo que ven, es decir, nos imitan porque somos sus referentes. Imitan a otros niños o a los hermanos porque para ellos, todo es nuevo. Así que una forma de que los peques aprendan a dejar el pañal es explicarles que papá, mamá o el hermanito no llevan pañal y hacen sus cosas en el wc. Podemos convertirlos en nuestros ayudantes y que vengan con nosotros cuando vamos a hacer nuestra necesidades, explicándoles que lo hacemos en el wc, nos sentamos, tiramos de la cadena, etc,…
  • Libros: los libros son siempre nuestros grandes aliados, con ellos nuestros peques aprenden a través de imágenes y de historias. Tener un buen libro que le guste y pueda explicarle este proceso, le ayudará a entenderlo. Te recomiendo dos libros que nos gustan mucho en casa por menos de 10€, son estos:
      • «Vaig al lavabo tot solet» de Brúixola Editorial: Un divertido libro con bonitas ilustraciones sobre animalitos que van al lavabo. Si ellos pueden hacerlo, seguro que tu peque también.

      • «Voy al baño solo» de Susaeta Ediciones: Bonito libro donde un niño explica el proceso que lleva a cabo para pasar del pañal al wc. Además, incluye dos divertidos pósters con pegatinas para acompañar este proceso de una manera divertida y con recompensa.

    • Póster con pegatinas: ¿a qué niño no le gusta pegar pegatinas? Pues vamos a crear un póster o dibujo que le llame la atención al niño, y cada vez que haga pipí o caca en el wc, pegaremos una pegatina. Además, podemos motivarle aún más diciéndole que si consigue pegar 5, tendrá una recompensa extra (que podremos elegir nosotros o dejar a su elección). Aquí te enseño el póster que hemos hecho a Martín, es un dibujo con un autobús, ya que le chiflan.

    • Progresivo: No quitemos el pañal de golpe, por favor, a no ser que veamos que el peque quiere y empieza a estar preparado. Podemos hacerlo progresivamente, alguna franja al día o algún momento durante el día. Incluso podemos dejarles que hagan el primer pipí de la mañana en el wc y luego le ponemos el pañal. Respetemos al niño, sus deseos, y nunca forzarlo a hacer algo que no esté preparado.
    • Facilitar: Facilitar significa ayudar al peque con esta fase. Podemos dejar que elija entre usar el orinal o sentarlo directamente en el reductor del wc. Podemos usar también un peldaño para que suba solo al wc y se sienta más seguro.

    ¿Y si llevo a cabo estos consejos pero no hay manera?

    Como te he dicho, con Martín hemos comenzado este verano y no lo veo preparado. Alguna vez ha pedido pipí y caca, y lo he sentado en el reductor del wc pero lloraba si pasaban cinco segundos y él no hacía nada. Entonces, yo le explicaba que debía relajarse, pero que si quería, lo bajaba y le ponía su pañal. Durante este tiempo, una vez hizo pipí y otra caca, y cuando lo hizo, lo premiamos con una pegatina que primero colocó en su mano, y luego la pegó en su póster, pero al día siguiente ya no quiso repetir. Así que nos toca esperar, acompañarlo, insistir cuando él quiera y estar ahí.

    ¿Y cuando retirar el pañal de noche? ¿Debe hacerse todo a la misma vez?

    Como os decía antes, no hace falta que se haga todo de golpe si no lo vemos preparado. Con Lucas, primero retiramos el pañal de día, y un par de semanas después, el de la noche. Y lo retiramos de noche porque se levantaba con el pañal seco y nada más levantarse, él sabía que tenía que ir al wc a hacer su primer pipí del día. Además, le hacíamos un juego muy especial: la luna, cada noche le traía un pañal, y se lo dejaba debajo de su almohada. Era el único pañal que se podía poner al día, y por eso, lo traía la luna. Al día siguiente, yo lo volvía a doblar ya que estaba completamente seco. Después de esas dos semanas, un día, cuando fue a buscar su pañal, vio un regalo y una carta que le había escrito la luna, le decía que ya estaba preparado para pasar la noche sin pañal, y que a cambio, le dejaba un pequeño regalito por lo bien que lo había estado haciendo (fue un puzzle de colores y le encantó).

    La verdad que Lucas nunca ha mojado la cama, nos lo ha puesto bastante fácil, pero si alguna vez la hubiera manchado, nunca le hubiéramos regañado, solamente explicarle que si tiene pipí de noche, debe pedirlo y papá o mamá le acompañaría al wc.

    Así que, contestando las preguntas, el pañal de noche debe retirarse cuando el peque esté listo y veamos que se levanta con el pañal seco durante unos días seguidos. Y no, no tiene porque hacerse a la misma vez, sigamos al niño y seamos respetuosos con este proceso.

    ¿Y si empieza el colegio y aún lleva pañal?

    Este es un tema que me mosquea bastante porque muchos colegios dicen que el niño debe empezar el cole sin llevar pañal, entonces nos estamos cargando la primera hipótesis de que es un proceso madurativo y es algo que no se aprende. Muchas escuelas ademas, dicen que no cambian pañales, y que si se hacen algo encima, llamarán a los padres, algo que me parece un poco mal porque si estos están trabajando, ¿cómo lo gestionan? Así que deberíamos buscar un colegio que fuera respetuoso con el niño y que compartiera nuestra manera de ver las cosas, porque luego a la larga también nos alegraremos con otros aspectos. Siempre es mejor un colegio que sea respetuoso que uno que sea estricto, los niños aprenderán mejor en un entorno feliz que no en uno donde no puedan ser escuchados.

    Conclusiones de esta operación pañal.

    Vamos a resumir los aspectos más importantes de esta entrada sobre la operación pañal.

    • Dejar el pañal es un proceso madurativo, no se aprende, así que dejemos de comparar unos niños con otros y entendamos que cada uno tiene un ritmo, y eso no lo hace ni mejor ni peor que otro.
    • No tengamos prisa, respetemos al niño y facilitemos este proceso con libros o recompensas para motivarle.
    • Nunca, nunca, nunca, nunca, nunca, por favor, NUNCA, castiguemos a un niño o le echemos bronca si se hace un pipí o caca encima, está aprendiendo y es normal que pasen estas cosas. ¿O a ti te gustaría que tu jefe te echara bronca durante los primeros días de tu nuevo trabajo cuando cometes un error? Tengamos EMPATÍA.

    ¿Cuál es tu consejo para esta operación pañal? Si te apetece compartir tu experiencia o hacerme alguna pregunta, por favor, déjame un comentario. Muchas gracias 😀

Resumen

También puede gustarte...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *