Hola,
como os conté al principio de la nueva aventura de nuestra familia, que puedes ver aquí:
Empieza una nueva vida… (4 a 8 semanas)
Adiós primer trimestre.. (8 a 12 semanas)
yo no supe que iba a ser hermano mayor hasta la semana 16 de embarazo de mi mamá. ¿Y por qué? Es un tema que creo que depende mucho de cada pareja y familia, el cuándo dar la noticia. Hay gente que nada más ver el positivo lo anuncia a los cuatro vientos, y otros como mis papás que hasta que no pasan el primer trimestre y ven que la ecografía y Triple Screening han salido bien, ya pueden dar la noticia. Y ¿cuál es la mejor opción? No hay una respuesta que sea mejor ni peor, eso dependerá de cada familia. Mi mamá es muy prudente con estas cosas y por eso, ella decidió esperar a pasar el primer trimestre para explicarlo a la gente más cercana, y no fue hasta pasada la semana 16 que ya se le notaba, que no lo iba diciendo a conocidos. Además, en redes sociales, no lo hemos anunciado hasta pasar la ecografía del segundo trimestre o ecografía morfológica, cuando hemos visto que todo está bien. Y es que no pasa nada en decirlo antes ni después, lo que es importante es sentirse cómodo y disfrutar dando la nueva.
Voy a ser hermano mayor, ¡qué ilusión!
Ahora os contaré cómo me dijeron a mí que iba a ser hermano mayor. Mis papás me fueron a buscar al cole, sí, papá también, que esa tarde se la cogió de fiesta. Yo ya sabía que esa tarde íbamos a ir al doctor de mamá, para ver si tenía un bebé en la barriga, porque yo le decía a mamá que tenía una barriga grande, que parecía que había un bebé ahí. Así que antes de ir al doctor, fuimos a merendar. Me encanta salir con mis papás, hablar, estar con ellos, jugar, y darnos un capricho de vez en cuando… así que ese momento fue genial para los tres.
Luego, fuimos al doctor de mamá. Yo estaba un poco extrañado con todo aquello, pero me porté genial y obedecí a todo lo que me pedían. Primero, tuvimos que esperar unos minutos en una sala con más gente, pero al poco rato, llamaron a mamá y los tres entramos en un despacho y fue ahí donde conocí al doctor. El me dió la mano y me explicó que le iba a hacer a mi mamá. Entonces, todos nos levantamos y fuimos a otra sala donde había una silla muy rara, y mamá se tumbó allí. Se quedó con la barriga al descubierto y a mí me trajeron una silla para que pudiera estar a la altura de papá y ver lo que iba a pasar.
La enfermera apagó la luz y el doctor encendió la pantalla. Yo aún no sabía bien lo que tenía que salir ahí, pero pronto vi una silueta y mis papás me explicaron que sí, que mamá tenía un bebé en la barriga y que iba a ser hermano mayor. Fue muy chulo porque el doctor me explicó qué era la cabeza y qué era el cuerpo, y vi cómo se movía, cómo su brazo iba de arriba abajo. Pero lo que más me gustó fue escuchar su corazón, porque latía muy rápido, más que el mío. No quité la mirada de la pantalla en todo el rato, me parecía muy emocionante todo lo que estábamos viviendo. Todos salimos del doctor de mamá contentos, y con varias fotos en papel del bebé, ¡es una pasada!
Y a partir de ese momento, todo el mundo me preguntaba si estaba contento por tener un hermanito, que qué iba a hacer al hermanito, que si lo iba a cuidar, que tendría que compartir con él, que si ayudaría a mamá, que si iba a cambiar pañales, que si esto y que si lo otro… y sé que lo hacen con buenas intenciones, pero no puedo sentirme a veces preocupado por lo que pasará,… ¿ y si mis papás ya no están tanto tiempo conmigo? ¿y si hay cambios de los cuales no estaré preparado? ¿y si mi mamá tiene que estar tanto con el bebé que ya no pasará tanto rato conmigo? En mi cabeza tengo muchas dudas e incertidumbre de lo que pasará cuando nazca el bebé, y aunque me gusta acariciar y dar besitos a la barriga de mamá, no puedo evitar sentirme nervioso por cómo la llegada del bebé cambiará nuestras vidas.
Participando en la toma de decisiones.
Y mamá sabe y entiende mis miedos, por eso, ella intenta explicarme cositas y lo que haremos cuando nazca el bebé para que yo me quede más tranquilo. Ella me dice cosas cómo:
- «Todos seguiremos durmiendo juntos en la misma habitación, pero serás tú quién decida cuando irte a la cama que tienes preparada en tu habitación». Es decir, que aunque llegue un bebé, eso no implicará que tenga que cambiarme sí o sí a mi habitación. Eso me deja más tranquilo, y ya decidiré yo si me cambiaré o no a mi habitación.
- «Hemos pensado que el bebé se llamará XXXXXX (en unos días lo revelaremos), ¿te gusta este nombre? ¿o te gustaría que se llamara de otra manera?» Me han dejado participar en la elección del nombre del bebé, y es cierto que el nombre que han propuesto mis papás me gusta tanto que no quiero que sea otro.
- «¿Te gusta este conjunto para el bebé? ¿Qué te parece si le compramos esto al bebé?». Y es que a mis papás les interesa mi opinión sobre cosas del bebé, y eso me hace ser partícipe de los preparativos de mi hermanito. Me implican tanto que eso me hace sentir a gusto.
- Mi mamá me ha explicado muchas cosas de lo que va a pasar: le crecerá la barriga a mamá, y cuando el bebé ya no quepa, tendrán que ir al hospital a que el doctor lo saque, pero que yo al ser pequeño no puedo entrar, entonces se llevarán una foto mía para que yo sepa que no me olvidan. Y yo me tendré que quedar a casa de los abuelos a dormir (yuppiiii!) y cuando mamá llamé, ya podré ir a conocer a mi hermanito, que le llevaré un regalo y un dibujo que tenemos que preparar cuando falte poco. Mamá dice que igual el hermanito también tendrá un regalito para mí. Todo esto me ayuda a no estar tan nervioso, porque si me anticipan los hechos, yo sé que pasará y eso me hace sentir más tranquilo.
- Mis papás dicen que como me convertiré en hermano mayor, tendremos que hacer una fiesta para celebrarlo, ¡¡ qué ganas tengo ya de ese día !!
En definitiva, creo que pase lo que pase, mis papás estarán ahí, porque siempre han demostrado que están a mi lado y que me quieren mucho, y estoy seguro de que eso no cambiará.
De la semana 12 a la 16, mamá ya se ha ido sintiendo mucho mejor, con más vitalidad y fuerza, hemos hecho nuevos planes, y me encanta dar besitos a la barriga de mamá, también hacerle preguntas cómo: ¿al bebé le gustarán los hoteles? Mis papás se reían muchísimo, no sé porqué, y me contestaron que seguro que sí, que sin vacaciones no nos íbamos a quedar. ¡¡Menos mal!!
Hasta aquí, un poquito más del diario de embarazo de mi mamá. Saludos,
